«El Comandante ha sido capturado y está siendo torturado. Sigue las desventuras de nuestros valientes en esta misión de rescate para mantener a salvo los secretos de la Legión.»
La operación de rescate ha dado comienzo. Los gritos de agonía del Comandante, torturado en la cima de la torre más alta del Castillo de Svrekenhal, resuenan en el campo de batalla como un canto ominoso que anuncia la calamidad. Zora, la Elegida del Dios Viviente, lidera a la Legión en un ataque frontal contra los no-muertos. Relámpagos iluminan la noche lluviosa mientras cuerpos impíos movidos por un ansia asesina desfilan a las órdenes de Dolor, el más fiero y peligroso de los Descorazonados al servicio de Descoyuntador.
Mientras tanto, a decenas de metros bajo este aciago escenario, un pequeño pelotón de valientes legionarios se adentra en las entrañas del castillo a través de una tubería de desagüe, aprovechando la distracción que la batalla les proporciona. Sin embargo, pronto descubrirán que ni los mejores planes tienen por qué salir bien. La muerte se cierne sobre la Legión, relamiéndose con cada alma segada. ¿A cuántos estarán dispuestos a sacrificar para salvar el mundo? Buena suerte.
